
El síntoma de parto que tiene más valor es la aparición de contracciones uterinas. El útero o matriz se endurece ocasionando molestias en el vientre y en la espalda. Estas sensaciones dolorosas son intermitentes, progresivamente rítmicas y persisten a pesar de cambiar de postura o levantarse de la cama. Pueden ir acompañadas de pequeñas señales de sangre. A partir de este momento debe abstenerse de ingerir ninguna comida sólida, pero no existe inconveniente en que beba agua o zumo de frutas.
Es conveniente que se traslade a la clínica, si:
Las contracciones presionan la cabeza fetal sobre el cérvix materno lo que produce el borramiento y dilatación del mismo hasta alcanzar 10 cm. Una vez completa la dilatación comienza la segunda fase del parto ó expulsivo donde las contracciones empujan al feto a través de la pelvis materna. En las animaciones podéis observar las distintas rotaciones que realiza la cabeza fetal para superar los distintos estrechos pélvicos.
Cada parto es diferente, y no siempre es posible prever con exactitud la conducta que deberá seguir su médico para ayudarle a usted y a su hijo. Sin embargo, es conveniente que durante el embarazo, preferentemente al final del mismo, hable usted con su obstetra respecto a este punto. En este momento usted ya se habrá hecho una idea, gracias a los cursos de preparación al parto, de las diversas posibilidades teóricas, y su médico contará también con la suficiente información como para poder emitir un pronóstico del parto.
Si el pronóstico de parto es absolutamente normal, existe la posibilidad de que usted escoja entre algunas alternativas esenciales. Así, por ejemplo, si desea o no algún tipo de analgesia, si prefiere o no que su marido permanezca a su lado en la sala de partos, si desea pasear y permanecer en su habitación el mayor tiempo posible, etc. Sin embargo debe usted tener en cuenta que el deseo de “naturalidad” en el parto no implica un abandono de las medidas de control que aplicamos en el hospital. En caso de ser preciso efectuaremos una vigilancia estricta de su hijo con los métodos de monitorización actuales.